Declaración: Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer

25 de noviembre de 2013

Acabar con la violencia de género es una prioridad en la agenda de este Día Internacional para Eliminar la Violencia contra la Mujer – ahora resaltado cada 25 del mes en la campaña ÚNETE del Secretario General de la ONU, Ban Ki-Moon para Eliminar la Violencia contra las Mujeres.

Una de cada tres mujeres sufren violencia de todo el mundo en su vida, de entre 15 y 76 por ciento dependiendo de donde vivan, con la mayoría de la violencia ocurriendo dentro de las relaciones íntimas, infligidas por un esposo o pareja. Y durante riesgo de conflicto armados o de desastres naturales el riego de violencia a las mujeres aumenta, por ejemplo, 21 por ciento de las mujeres refugiadas que escapan de la guerra civil de Siria a Líbano informó de violencia y el siete por ciento de violencia sexual.

En marzo de 2013, la Presidenta de la Internacional Socialista de Mujeres Ouafa Hajji habló en la 57 sesión de la Comisión sobre la Condición de la Mujer en la eliminación y prevención de todas las formas de violencia contra las mujeres y las niñas, y se alcanzó un acuerdo para fortalecer los marcos legales y de políticas, abordar las causas y los factores de riesgo estructurales y subyacentes, fortalecer los programas de servicios multisectoriales y mejorar nuestra base de datos.

La Internacional Socialista de Mujeres acoge con satisfacción un acuerdo del G-8 en abril de 2013 sobre prevención de la violencia sexual en los conflictos que llevó a un acuerdo por el gobierno del Reino Unido, la ONU y las organizaciones no gubernamentales en noviembre de 2013 para proporcionar 20 países prioritarios con los suministros de tratamiento para las víctimas de violación en 2015; las nuevas directrices de evacuación masiva; nuevos expertos de género de la violencia en los equipos de respuesta; farolas solares en los campamentos y asentamientos, y aumento de la financiación para las iniciativas de violencia de género.

Para la Internacional Socialista de Mujeres, la violencia contra las mujeres es la forma más extrema de discriminación contra ellas. Es un medio de control de las mujeres hacia un modelo de las relaciones de género en el que las mujeres aportan reposición sociales no remuneradas para apoyar el trabajo remunerado de los hombres. La reducción de la provisión estatal de los servicios desde la crisis financiera global significa que las mujeres a menudo no son capaces de proporcionar esto. Como los salarios disminuyen y los precios suben, las mujeres se emplean cada vez más para largas horas en condiciones inseguras. Las mujeres que operan fuera de los roles de género desiguales tradicionales corren el riesgo de la violencia, por lo que también se han reducido los servicios de prevención y protección.

La Internacional Socialista de Mujeres rechaza papeles mitificados de la desigualdad como protección contra la violencia, y en cambio exige igualdad de género política, económica y social. Destacamos la declaración de la Directora Ejecutiva de la ONU Mujeres Phumzile de Mlambo-Ngcuka hoy que la “prevención [de la violencia] debe abordar la causa raíz: la desigualdad de género ” y apoya el llamamiento de la Mujer de la ONU por ‘un objetivo independiente sobre los derechos de las mujeres, el empoderamiento de la mujer y la igualdad de género’ en el post 2015 Objetivos de Desarrollo Sostenible para hacer frente a la omisión flagrante en los ODM.

La Internacional Socialista de Mujeres muestra su consternación por el retroceso de los avances en la igualdad de género desde la crisis económica de 2008. Por lo tanto, instamos a los gobiernos socialdemócratas y socialistas y a los partidos políticos a promover la igualdad de género en la educación, la participación política y el empoderamiento económico, y abordamos el contexto económico que está obstaculizando la igualdad de género mediante la regulación del sector de servicios financieros internacionales para proteger a las poblaciones inocentes de los efectos de sus ataques especulativos.

En particular condenamos la oposición republicana de la EE.UU a la ley Internacional sobre la Violencia contra las Mujeres para priorizar la protección contra la violencia de género en la ayuda internacional de los EE.UU.; y hace un llamamiento a todos los gobiernos que no lo hayan hecho a que promulguen con urgencia una legislación que impone la justicia expedita, la reparación del daño y severo castigo de los perpetradores de la violencia.

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